jueves, 13 de febrero de 2014

En esta sin estación, toda manifestación externa de dolor tiene forma de algo bueno;  de cosas que uno pide a la fortuna, a la cruza del índice y del medio y a las magias de la fe.
No quiero volver a querer vivir para soñar, pero no sé dónde quiero estar. Ninguna brisa me apasiona, ninguna escalera me intriga y el vacío de no saber quién quiero ser me hace sentir alejada de quien soy.
Quiero un esbozo porque ya tengo fortaleza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario